“La música cofrade es un hobby que llevo practicando desde que tenía 14 o 15 años, prácticamente media vida, y que más satisfacciones me ha dado mostrando mi faceta artística”
El músico ubetense, Cristóbal López Gándara, será el encargado de pregonar la Semana Santa de Úbeda en esta edición de 2023, una de las fechas más señaladas e importantes para la ciudad, el maestro ha hablado con Úbeda Comarcal, para desgranar algunas de las notas claves de este pregón, que se anuncia musical, sincero y emotivo.
–¿Qué supone para usted ser pregonero de la Semana Santa de Úbeda?
–Un gozo y una responsabilidad, porque al fin y al cabo es poner en valor, dentro de un acto, como es el pregón, sin duda el más importante no litúrgico, de la Semana Santa ubetense, a los compositores de la Semana Mayor de Úbeda, Victoriano García, Emilio Sánchez o Manuel Antonio Herrera, y también a los músicos que salen en cada procesión. Poner en valor su figura es toda una responsabilidad, pero es un gozo, porque al final es como una especie de reconocimiento a la carrera de uno también.
–¿Qué sintió al recibir la noticia de que iba a ser el próximo pregonero?
–Imagínate, en primer lugar fue toda una sorpresa, sobre todo por la juventud, porque alomejor puedes imaginar que algún día lo puedes dar, sin embargo quizás no tan pronto. Y sobre todo una enorme responsabilidad y algo que se venía muy grande, y así se ha demostrado en este año que llevo como pregonero, puesto que supe la noticia en el mes de abril del año pasado. De manera que lleva siendo un año, al menos sabiéndolo yo, una carrera de fondo, algo que está ahí como un objetivo y que hay que llegar a la meta y en condiciones, sobre todo mentales, porque esto es algo muy grande y una responsabilidad enorme que intentaremos satisfacer el próximo 1 de abril.
–¿Cómo ha influido o qué ha significado en su trayectoria profesional la música cofrade?
–Al final la música cofrade es un hobby porque mi trabajo es como profesor de Composición en el conservatorio de música, ergo, es un hobby que llevo practicando desde aproximadamente los catorce o quince años, prácticamente media vida, y es algo que me cambió la vida porque forma parte de mi trayectoria artística y es sin duda lo que más satisfacciones me ha dado y lo que ha dado a conocer mi faceta artística, no sólo en Úbeda, también en lugares como Sevilla, Málaga, Huelva o Cádiz, por ejemplo, en definitiva todos los lugares en los que encargan mi música y la interpretan.
–¿Qué inspira al maestro López Gándara, a la hora de componer?
–Yo siempre digo que la inspiración es un pequeño invento de los románticos, porque realmente lo que tiene es que pillarte la inspiración trabajando y con una sólida formación detrás. Tú puedes estar muy inspirado, tener unas grandes ideas, tener lo que quieras, pero sin trabajar, sin el día a día, sin el esfuerzo y sin esa formación detrás, esa cultura y esa biblioteca de ideas que tenemos en la cabeza sería imposible hacer este trabajo.
–¿Cómo será este pregón?
–Un pregón con muchísima verdad, con muchísimos sentimientos, muy a nivel emocional y con muchísima música, porque al final, como comentaba al principio, tiene que ser un homenaje a ese trabajo que hacemos, tal vez de forma secundaria, pero sin la música parte de nuestra Semana Santa no tendría sentido, porque la música da sentido a mucha de las cosas que suceden en esta semana. La música nos conecta a nivel emocional con lo que vemos. En resumen, tendrá muchísima verdad, música y emoción.
–¿Alguna colaboración que pueda adelantar?
–Por supuesto tienen que acompañarme, como no puede ser de otra forma, los músicos y estarán presentes las tres bandas de las que formo parte, que son la Agrupación Musical Ubetense, que como siempre participa en todos los pregones en la obertura solemne del acto y además durante el transcurso del mismo la Banda de Tambores y Cornetas María Santísima del Amor y la Sociedad Filarmónica de Nuestra Señora de Gracia que es la que dirijo en Semana Santa y con la que se me puede ver en las procesiones por las calles.
–¿Qué significa para usted la Semana Mayor de Úbeda?
–Siempre digo que la Semana Santa de Úbeda es una de las patas que sostiene la sociedad ubetense, no se entendería mucho la esencia de la propia Úbeda sin la Semana Santa. Son tantísimos años, tradición e historias detrás y tantísima la implicación de la sociedad ubetense de esa cantidad de habitantes que son hermanos de algunas cofradías, que no se entendería la ciudad sin su Semana de Pasión. Para mí es un eje catalizador de todo lo que sucede a lo largo del año y que tiene su eje en las propias cofradías.
–¿A qué cofradías pertenece?
–Soy hermano del Borriquillo, de la Virgen de Gracia, de la Noche Oscura y de la Caída, no sé si seré de más en el futuro, espero que sí, porque me unen muchos lazos con muchas de ellas, pero hasta el día de hoy son a las que pertenezco. Y además, de las cofradías de Gloria soy hermano de la Virgen del Carmen.
–¿Qué recuerdo guarda con más cariño de esta semana tan importante para Úbeda?
–Sin duda todos los momentos que vivo tanto con la Banda del Amor como con la Sociedad Filarmónica de Nuestra Señora de Gracia, son innumerables los momentos, las estampas que vives y son recuerdos que te quedan para toda la vida. Cuando sale la Virgen de Gracia, cuando pasamos por la puerta de Graná o la entrada, que es muy emocionante, cuando ves salir el Borriquillo, es el sentimiento de que vuelves a estar ahí, como el renacer de una nueva vieja vida. La salida de la Columna es algo tremendamente emocionante, cuando se encierra el Resucitado, con ese cierto toque de tristeza de que todo ha acabado, ver salir la Caída es impresionante. De todas las que hable, porque como participamos en tantísimas procesiones, al final son tantos los momentos que no te puedes quedar con alguno. Sin embargo si uno hay que me conmueve por dentro es cuando bajas la calle Trinidad el Domingo de Ramos y ya va a comenzar todo, eso es, sin duda lo más emocionante.
–¿Cuál es la marcha que más ha significado en su vida tanto de autoría propia como ajena?
–Sin duda la que más me emociona es la marcha de la cofradía de las Angustias de Victoriano García, la cual considero que es el himno de la Semana Santa de Úbeda, aunque el ‘Miserere’ por tradición e historia se la considera así, pero la marcha de las Angustias para mí es la que más me mueve por dentro. Y por otra parte, las que más van a sonar en el pregón de mi autoría son ‘Lágrimas de Amargura’ dedicada a la Caída y ‘Al Rey de la Trinidad’ de la Banda del Amor.
–¿En qué momento y cómo despertó su pasión por la música?
–Soy uno de esos niños de la generación en la que todos debíamos realizar actividades extraescolares, mis hermanos hicieron actividades como Karate o baile, entre otras. Y a mí me pilló ‘la moda’ del conservatorio, por lo que me apuntaron a clases particulares de piano, y eso poco menos que lo odiaba, yo quería, como cualquier niño, ir a jugar al fútbol. Y llegó el día en el que empezó a ‘picarme el gusanillo’, me comenzó a gustar, veía que era una cosa que llamaba la atención, que le gustaba a la gente, que era algo que podía despertar en ti algo único y especial, entonces empecé a dedicarle tiempo, todo el tiempo, hasta el día de hoy que es mi profesión. Fue en ese momento, durante los años de adolescencia, en los que estás pensando en otra cosa y sin embargo llega el momento en el que te atrae y te ata de una manera indefectible.
–¿Qué notas fueron las que le hicieron saber que éste era su camino?
–En la música no te podría decir que me quedara con algo en concreto, pero si hay algo que me enamoró desde el principio, desde que era niño, los típicos discos que tienes en casa de música clásica, fue ‘El sueño de amor’ de Franz Liszt, esa obra, la recomiendo a cualquiera para que la escuche, es una bagatela, Franz Liszt escribió mucha música mejor y más compleja, en cambio esa en concreto fue un amor a primera vista, y eso fue también lo que me llevó a buscar un poco más el piano y a dedicarle horas y trabajar y sacar adelante aquello que en principio no me gustaba.
–¿Qué mensaje le gustaría enviar como pregonero a los ubetenses?
–Que tengan en cuenta cuando nos ven, sobre todo en las calles mientras disfrutan de nuestra música, que detrás hay una cantidad de trabajo y de horas que no están pagadas con absolutamente nada. Lo que disfrutan estando de fiesta, mientras nosotros al final la amenizamos, tiene una cantidad de trabajo a lo largo de todo el año, no sólo con la propia banda, sino de la formación de los propios músicos que estudian en el conservatorio o los que ensayan en su casa, en definitiva, hay una cantidad de horas a lo largo de todo el año que luego se resume en una semana, y que sepan valorar todas esas historias que hay detrás de la música que escuchan.
